MARATO I MITJA: CASTELLON - PEÑAGOLOSA.
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| Llegada a meta |
Y así, poco a poco se iba acercando el gran día. En las últimas semanas disminuian los entrenamientos y aumentaba el descanso, había que llegar con las pilas bien cargadas.
El viernes, al finalizar las clases salgo camino de Castellón, con un sol y un calor de justicia, que hacian presagiar el infierno que nos esperaba.
Una vez en Castellón, aún me da tiempo de ver el último cuarto de la semifinal de la Final Four CSKA - Panathinaikos mientras meriendo. Mi madre me acompaña a la feria del corredor para recoger el dorsal. Nada más llegar a la plaza de las Aulas, me encuentro a Oscar, que esta metido en la organización, recogemos el dorsal, damos una vuelta por los diferentes stands y para casa a estirar un poco las piernas, una buena ducha y a cenar un buen plato de tallarines y pollo (había que llenar bien el depósito) mientras veo como Spanoulis hace de las suyas y el Olympiakos elimina al Barça. Con este buen sabor de boca, acabo de preparar las cosas para mañana y a la cama, pues a las 4:35 sonará el despertador.
Y el despertador sonó, desayuno un vaso de leche con cereales, un platano y nos vamos para la UJI.
A esas horas, no hay tráfico, Castellón esta desierto, solo cuando pasas por delante de alguna discoteca ves a alguien, sin embargo cuando te acercas a la UJI comienzas a ver coches y todos nos diriguimos al mismo sitio. Aparcamos en el parking, son las 5:15 de la mañana, nos vamos a dejar la mochila a las furgonetas que nos las llevaran a la meta en Sant Joan de Peñagolosa, pasamos el control del chip y nos vamos hacia la salida. Allí me encuentro a Oscar y me dice que él estará en la meta, y se despide con un "nos vemos arriba".
Están a punto de dar las 6 de la mañana y el nerviosismo se apodera de todos y cada uno de los 1537
inconscientes que nos hemos embarcado en esta aventura, y de los casi 300 locos que disputarán las CSP 115.
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| Al fondo nos espera el Peñagolosa desfiante |
Nada más pasar Borriol nos vamos a encontrar con la primera gran dificultad de la jornada, la subida a la Pedra Serra de Borriol.
Se trata de una senda estrecha, llena de piedras, con un gran desnivel (algunas rampas alcanzaran el 22%) y en ocasiones tenemos que apartar la vegetación con las manos para abrirnos paso; todos en fila de a uno, caminando. Recuerdo que atravesamos el KM 10 con 1h. y 10 min. Poco depués llegamos al primer control situado en el KM 12,700.
Aunque de momento aún es muy temprano (sobre las 7:25) y la temperatura es estupenda, conviene hidratarse bien con vistas a la que nos espera más adelante. Aprovechamos en el control para beber un par de vasos de agua y otros tantos de bebida isotónica y comer unos cuantos trozos de platano, y sin perder más tiempo seguimos la marcha a la carrera.
En este tramo el terreno se vuelve más favorable, algunos kms por asfalto y bastante por pista con descensos y ascensos no muy pronunciados por lo que podemos mantener un buen ritmo de carrera. Llegamos al KM 20 con 2h. y 20min. y tras un ascenso a través de una senda alcanzamos el 2º control (La Bassa) en el KM 24. Volvemos a llenar bien el depósito: agua, bebidas isotónicas, platano y una especie de barquillos de chocolate.
Por el momento las sensaciones son extraordinarias, nos encontramos bien, con fuerzas, en los tramos de carrera vamos pasando a corredores, nuestro punto flojo son las bajadas más técnicas por sendas, llenas de piedras, por las que bajamos corriendo pero con bastante precaución, pues lo único que podemos conseguir es una torcedura o esguince de tobillo que acabaría con todas nuestras esperanzas. Es normal ver como en estas bajadas por sendas nos pasan varios corredores, a los que mas adelante cuando discurrimos por pistas y se puede correr alcanzamos de nuevo.
Tras una tortuosa bajada por una de esas sendas que tan poco nos gustan atravesamos la rambla de la Viuda y con buen ritmo de carrera ponemos rumbo a Les Useres. Justo cuando comenzamos la senda de subida hacia el pueblo atravesamos el KM 30 con un tiempo de 3h. y 30 min.
Y por fin en el KM 32,700 entramos en Les Useres, gran cantidad de público nos recibe a ambos lados de la carretera, los aplausos y los gritos de ánimo nos ayudan a subir el último tramo, se escucha el sonido de la megafonia situada en el punto de control, que va nombrando y animando a cada uno de los participantes que por allí pasamos. LLega el tiempo de reponer energias, lo primero es beber pues ya son cerca de las 10 de la mañana y el calor empieza a apretar, tampoco faltarán nuestros trozos de platano, los barquillos de chocolate y un bocadillo de atun con tomate. Aprovechamos para llamar a mi madre, pues más tarde cuando mi hermana acabe un curso, cogerán el coche y se vendrán para Sant Joan para vernos llegar.
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| Subiendo por un sendero |
Después de este pequeño descanso y de reponer fuerzas, hay que continuar....y nos espera lo peor. La gente decía que hasta Useres se llevaba bien pero que a partire de Useres quedaba lo más duro, todo para arriba, y encima con un calor que ya era infernal.
Atravesamos el pueblo caminando por sus empinadas calles y nada mas salir del pueblo comienza la subida, 4 kms con una pendiente media del 10% primero por un sendero y luego por pista. Vamos caminando, el sol aprieta de lo lindo y el calor es insoportable. Llevamos cerca de 35 kms y las piernas ya comienzan a resentirse. Subimos con calma, todos vamos caminando, algunos caminan a un ritmo más elevado y nos sobrepasan, pero nosotros vamos tranquilos, todavía queda mucho por delante, y muy duro.
Cuando alcanzamos la cima de la Serra de la Creu, nos espera una senda de bajada llena de piedras y en un continuo zig-zag que hacia que los cuadricepsse cargaran y se pusieran duros como piedras.
Y así entre un continuo subir y un poco de bajar alcanzamos el 4º control en el KM 42,54 (Sant Miquel de Torrecelles). Llegabamos muy tocados, el calor era insoportable, no habia ni una sombra y llegabamos a los 37 ºC, recuerdo la subida a Sant Miquel por la senda, caminando, agotados y a medida que nos acercabamos gente animándonos, resultaba emocionante como gente que no conoces de nada te llamaba por tu nombre (llevabamos el nombre escrito en el dorsal) dandote ánimos: ¡Vamós Luis, que ya estais arriba y ahí teneis agua!. La entrada en Sant Miquel fue espectacular, una pequeña hermita encima de una montañita con un patio interior al que accedes a través de un arco de piedra, como si fuera una muralla, y allí en el patio de la hermita estaba el avituallamiento. Bajo la sombra de los porches de la hermita, bebimos y comimos, las fuerzas ya estaban muy mermadas y el camino por recorrer aún muy largo. ¡¡Que avituallamiento!! había de todo, y que ricos los trozos de torta de tomate.....mientras estabamos comiendo, delante de mi veo a un chico medio de espaldas cogiendo comida, y pienso parece Raúl (un primo mio) y en efecto era él. Hablamos un poco mientras comíamos y tocaba continuar.
Nos enfrentabamos a La Lloma de Bernat, 4 kms de subida continua, sin descanso, con rampas de hasta el 22%, por una senda pedregosa, con un sol de justicia y sin una sombra a la vista. El termometro sobrepasa los 37ºC y a pesar de que el avituallamiento de Sant Miquel nos habia dado "la vida", las piernas estaban agarrotadas y la fatiga se apoderaba de nosotros, Subíamos caminando, el ritmo era lento y nos alcanzaban algunos participantes que caminaban a un ritmo superior al nuestro. Uno de ellos, con la camiseta del C.D. Castellon, al llegar a nuestra altura, me coge del brazo y me pregunta: ¿como lo llevas?, no lo había reconocido al principio, pero enseguida me doy cuenta de que era Maxi. Comentamos el calor que hace y lo duro que esta siendo, él sigue hacia delante caminando más rápido que nosotros y poco a poco nos va dejando atrás.
Llegamos a lo alto de la Lloma y allí nos espera un avituallamiento líquido, bebemos agua y bebida isotónica, nos refrescamos la cabeza con agua y toca seguir.
Ya hace tiempo que solo hacemos que mirar a los lados a ver si vemos la señal de los 50 kms, alcanzar ese punto va a ser una gran inyección de moral, y por fin, ante nuestros ojos la señal de 50 kms.A lo lejos ya vemos Xodos, un última subida y entramos en el pueblo, impresionante la gente animándonos a la entrada del pueblo.
Xodos, 51,780 kms recorridos y 5º control. Estamos en el avituallamiento, reponiendo energías y cual es mi sorpresa cuando me doy cuenta de que entre los que nos daban el avituallamiento están Jose Maria y una de las gemelas Flor, dos ex-alumnos mios de las clases de gimnasia de mantenimiento de adultos de Castellón. Tras compartir un rato con ellos, debemos proseguir, me dan una botella de bebida isotónica para que me la lleve y de nuevo en marcha.
A la salida de Xodos el terreno suaviza y nos permite correr, además observamos como el cielo en la cima del peñagolosa comienza a nublarse, ¡grandes noticias sin duda!, a los pocos minutos el sol desaparece entre las nubes, podremos subir el Marinet sin tanta calor. A pesar de la dureza de este tramo con grandes pendientes que se mantienen de manera muy constante y que alcanzaran hasta el 20% es un alivio que no haga sol y que la temperatura haya bajado unos grados, lo que nos permitirá subir a un paso mucho más rápido del que llevabamos en las subidas anteriores donde el sol y calor nos llevaban completamente asfixiados.
Por primera vez en toda la carrera nos hemos quedado solos, nadie por delante, nadie por detrás, tan sólo a nuestro lado Jose Francisco con el que vamos subiendo y conversando. Posteriormente, volveremos a ver corredores, alcanzaremos a algun participante y otros nos sobrepasaran a nosotros.
La climatología nos ha dado una tregua e incluso en lo alto de la montaña se escuchan truenos.
Estamos a punto de llegar al punto más alto de la prueba La Banyadera a 1.510 mts de altitud, donde encontraremos un avituallamiento líquido.
Recibimos una llamada de mi hermana, que están en Vistabella, y están viendo pasar a corredores, yo le digo que me faltan solo unos 4 kms para la meta. No recuerdo que pasaramos por Vistabella, empiezo a dudar de si el pueblo anterior era Xodos o Vistabella, le pregunto a Jose Francisco con el que habia compartido los últimos kms y que ya tenia experiencia en esta carrera y me confirma que en efecto no pasamos por Vistabella. Pero si no pasamos ¿cómo es que estaban viendo pasara a corredores?.
Por fin coronamos La Banyadera, avituallamiento líquido en el que no paramos, ya que habíamos estado bebiendo de la botella que nos dieron en Xodos, tiramos la botella a la basura y comenzamos los 3 kms de descenso que nos sacarán del infierno y nos conducirán a la gloria. Hace un poco que ha comenzado a llover, no muy fuerte, pero las rocas están mojadas y da un poco de respeto por si resbalan. Intentamos ponernos en contacto con mi hermana y mi madre pero no hay cobertura.
Nos aproximamos a la meta, una chica nos dice "ánimo que sólo os quedan 500 metros", seguimos corriendo a los pocos minutos un chico dice " vamos 1000 metros y ya estais" pues si hace un rato nos habian dicho 500 metros, ¡esto nunca se acaba!.
Por fin ya vemos la meta, seguimos corriendo, una curva de 180º donde estaba Oscar controlando la llegada y por fin recta de meta, la gente se agolpa a ambos lados y no para de aplaudir y animar, yo les digo: "nos aplauden a nosotros, lo hemos conseguido, sin vuestra ayuda no lo hubiera logrado" "Padre, Zarco, gracias".
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| En procesión hacia Sant Joan de Peñagolosa |
Devolvemos el chip, cogemos el bocadillo de jamón y una bebida isotónica, no tenemos hambre, solo sed. Nos dan un chaleco de la carrera y vamos a coger la mochila que habíamos dejado en la salida.
Nos vamos a la carpa de los masajes, y mientras esperamos nuestro turno, veo que entran mi hermana y mi madre. Resulta que los que veian pasar en Vistabella eran los "locos" de la CSP 115, y que al darse cuenta se vinieron para la meta. Al llegar vieron a Oscar y le preguntaron por mi, si había llegado ya, y les dijo que sí, que estaba en la carpa de los masajes.
A todo esto comenzo a llover cada vez más y más fuerte, alli estuvimos cobijados viendo llegar a los valientes que iban llegando, hablando con nuestro primo Raul, tambien vimos a un compañero del colegio, Felix, que acababa de llegar, a gente de Grapa.... e incluso cuando ya nos ibamos, la llegada del primer clasificado de la CSP115.
A pesar del infierno en que se convirtio la carrera por el calor, de los kms y kms de continua subida, de los tramos de piedras que se te "clavaban" en la planta de los pies, de la fatiga, el agotamiento, las ampollas, el dolor de piernas......nada puede empañar la enorme satisfacción que sentimos al cruzar la línea de meta y haber superado este reto, que compensa con creces todo el sufrimiento anterior.
Hemos vivido una mágnifica experiencia, que no olvidaremos, con una impresionante organización, con unos voluntarios que en todo momento se han preocupado por ofrecernos todo lo necesario para lograr nuestro objetivo,con un gran compañerismo y solidaridad entre todos los participantes y con un público que en todo momento nos ha estado apoyando y dando ánimos. todo ello hacen que la prueba discurra dentro de un ambiente excepcional y místico.
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| Dejando atras Les Useres |
"La MIM más dura" ese es el titulo que aparece en la pagina oficial de la Marato i Mitja, en la que se puede leer: "Calor, calor y más calor, y para postre... lluvia a raudales. Enhorabuena a los que conseguisteis terminarla y escapar del "infierno en llamas" llegando a San Juan, dejando admirados y boquiabiertos a los que allí estábamos. Verdaderamente fue "el día más largo". ¡¡¡Tenéis mucho mucho mérito!!!
También nuestro mayor reconocimiento a los que tuvisteis que abandonar, porque lo intentasteis a pesar de las pésimas previsiones. Sólo deciros que el año que viene hay otra oportunidad y que es casi imposible que las condiciones sean tan malas como las de este año".
Y para que os hagais una idea de lo que es la Mim, aquí os dejo un par de fantásticos vídeos.
